Aún hoy se desconocen los motivos que impulsaron a los
griegos a crear los Juegos Olímpicos. La ciudad de Olimpia, situada en el Peloponeso, a unos 80 kilómetros de Esparta
y a 320 de Atenas, era un antiguo santuario dedicado a Zeus, padre de los
dioses. Desde muy pronto Olimpia ocupó un lugar importante en el culto a Zeus,
aunque se desconocen los motivos exactos.
La importancia del santuario y de los festivales religiosos
y deportivos determinaron que surgiesen muchas leyendas que asociaban a Olimpia
con el culto a Hércules, considerado el fundador de los Juegos.
Las actividades agonísticas, en que los Juegos Olímpicos
antiguos se desarrollaron por medio de la carrera, el salto y el lanzamiento.
Durante los juegos tenían lugar numerosas ceremonias
religiosas, al igual que en los otros lugares de Grecia donde se celebraban
juegos atléticos (Delfos, Corintio y Nemea) con un claro carácter panhelénico,
es decir, con la participación de todas las ciudades griegas.
La tradición griega asignaba la fundación del festival a
diferentes dioses, héroes y figuras legendarias: Zeus, a los Dactilos cretenses
(REA-HIJOS-CUIDADOS) o Heracles.
- La carrera (dromos): fue sin lugar a dudas, tanto por su importancia, como por su permanencia y tradición, una de las piezas agonísticas fundamentales que compusieron el programa deportivo de los Juegos de Olimpia. Es más, durante muchos siglos, las Olimpiadas se redujeron simplemente a la celebración de un concurso, que consistía, precisamente, en una sola competición de carrera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario